El CB Granada sale en defensa de Fernández y desaprueba los gritos de «pesetero» oídos en el Palacio
El club se desliga de los aficionados. La duda sobre la manera en que iba a recibir la grada del Palacio de los Deportes a Jesús Fernández se disipó en la mañana de ayer.
Mientras sus compañeros del ViveMenorca realizaban la rueda de calentamiento, el de Villena entró en la cancha enfundado en su chándal y se sentó en el banquillo, sin hacer ni siquiera la tentativa de probar su tobillo. Ya sabía que no iba a poder jugar ese partido tan especial para él. Cuando llegó Fernández había poca gente en el recinto, pero ya entonces pudieron escucharse algunos aplausos y varios silbidos que estuvieron acompañados de gritos de «pesetero». La respuesta de los aficionados no fue masiva ni secundada por todos los asistentes, pero en ese peculiar 'duelo' se impusieron finalmente los abucheos. Sin jugar. La última vez que el rencor de una parte de los aficionados se hizo patente fue en un tiempo muerto durante el primer cuarto. Ya no hubo más referencias hacia el pívot alicantino, salvo cuando se le cantó con sorna «que bote Fernández» cuando el partido estaba ya decantado a favor del conjunto granadino. Si su esguince de tobillo no le hubiera impedido disputar el choque, posiblemente habrían sido más numerosas. Jesús tardó poco en abandonar el Palacio. Después de pasar por el vestuario y hablar fugazmente con las personas que se encontraban en el interior del pabellón, el pívot se dirigió al autobús del Menorca con cara de pocos amigos. La recepción de los aficionados parecía que le había afectado.Más tarde, cuando salieron los componentes de la plantilla nazarí, todos quisieron expresar su desacuerdo con el recibimiento brindado por la grada. El capitán Pecile comentó que «al principio pensaba que era una broma pero luego vi que no era así. No me gustó la actitud de los aficionados porque él se ha esforzado mucho aquí y se merece más respeto».Sergio Valdeolmillos se movió en la misma línea al expresar que «no creo que ese recibimiento sea el más correcto. Hay que darle cariño por todo lo que ha hecho durante estos años». Pese a que la plantilla no comulga con la grada, la mayoría de la gente parece que prefiere quedarse con la forma en que se marchó antes que con las alegrías que propició en el club. J. M Por cierto, los buenos aficionados al basquet, seguidores de nuestro pìvot, ya saben que el partido terminó con víctoria local: C.B. Granada 94 - ViveMenorca 76.
Por: Villena.net
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